El comienzo de mayo de 2025 quedará inscrito con letras de oro en la historia de la isla de Lošinj. En el ambiente de una gran celebración, que conmemora los impresionantes 140 años de turismo organizado, se logró una hazaña memorable en la plaza principal de Mali Lošinj: ¡se batió un récord mundial Guinness! El evento central de la celebración fue la creación y el reconocimiento oficial del krokant de Lošinj más alto del mundo, un magnífico dulce que simboliza la larga y rica tradición de esta isla del Kvarner.

Este gigante dulce, elaborado con increíble precisión y paciencia, alcanzó una altura de nada menos que 2,73 metros. Constaba de 14 pisos meticulosamente elaborados, que representaban simbólicamente las 14 décadas de historia turística de Lošinj. El peso total de esta singular escultura de azúcar y almendras fue de 57,5 kilogramos. Todo el proceso fue supervisado y confirmado oficialmente por Paulina Sapinska, representante de Guinness World Records, quien, tras una medición y verificación detalladas, anunció solemnemente que el Krokant de Lošinj había entrado oficialmente en el prestigioso libro de los récords mundiales como la estructura comestible más alta de su tipo.

El arduo camino hacia el récord

Detrás de este espectacular logro se esconden días de trabajo dedicado y cientos de horas invertidas. El maestro pastelero principal, Petar Goleš de la famosa pastelería de Lošinj Slastičarnica Moby Dick, junto con sus trabajadoras colaboradoras, dirigió el proyecto de creación de este krokant de récord. Los preparativos fueron extremadamente exigentes; duraron días e incluyeron la fabricación de más de dos mil piezas individuales que luego se ensamblaron en un todo. Se invirtieron casi 200 horas de trabajo solo en la fase preparatoria, antes de que comenzara el montaje propiamente dicho en la plaza principal de Mali Lošinj.

El propio acto de construir el krokant al aire libre, ante los ojos del público, fue un evento especial. Duró casi ocho horas, y miles de curiosos ciudadanos de Mali Lošinj y numerosos turistas siguieron cada paso de este fascinante proceso durante todo el día, desde las primeras horas de la mañana del 3 de mayo de 2025 hasta la culminación vespertina. El ambiente estaba lleno de expectación y orgullo mientras la dulce estructura crecía piso por piso.

Tradición entretejida en azúcar y almendras

El krokant de Lošinj no es solo un postre; es una parte profundamente arraigada del patrimonio cultural de la isla de Lošinj. Tradicionalmente se prepara con solo dos ingredientes principales, azúcar y almendras, que antiguamente se consideraban un lujo, por lo que el krokant se convirtió en símbolo de riqueza, abundancia y prosperidad. Durante generaciones, se ha elaborado para los momentos más solemnes de la vida de los isleños: bodas, bautizos, aniversarios importantes y celebraciones. Era especialmente apreciado en las familias de los capitanes y marineros de Lošinj.

Existe también una antigua costumbre de Lošinj, casi un ritual, asociada a este dulce. El krokant ceremonial se rompe tradicionalmente con un sable al final de la celebración. Se cree que este acto trae suerte y prosperidad a los celebrantes, y la leyenda dice: cuantos más pedazos se rompa el krokant, más feliz y rico será el futuro. La importancia de esta tradición ha sido reconocida a un nivel superior, por lo que el Museo de Lošinj ha iniciado una iniciativa para inscribir el krokant de Lošinj en el Registro del Patrimonio Cultural Inmaterial de la República de Croacia, con el fin de preservar esta habilidad y costumbres para las generaciones futuras.

El orgulloso maestro pastelero y su visión

Visiblemente feliz y orgulloso, el maestro pastelero Petar Goleš compartió sus sentimientos tras la confirmación del récord: "Estoy sumamente feliz de haber tenido la oportunidad y el honor de construir con mis propias manos, con la ayuda de las colaboradoras de nuestra pastelería familiar, el Krokant de Lošinj más grande de la historia. En cada uno de estos 14 pisos, además de azúcar y almendras, se ha tejido mucho esfuerzo, paciencia y amor. Es nuestra dedicatoria a las generaciones de habitantes de Lošinj, incluida nuestra familia, que durante décadas han construido y fomentado el turismo en esta hermosa isla".

Goleš, que se dedica más seriamente a la elaboración de krokant desde 2018 y cuyas creaciones son parte indispensable de muchas celebraciones en la isla, añadió: "Lošinj ha demostrado una vez más cuánto valora la comunidad, su patrimonio y su tradición. El hecho de que hayamos roto nuestro festivo y récord krokant en innumerables pedazos, que luego comimos juntos, anuncia simbólicamente prosperidad y bienestar para nuestra isla Lošinj en el futuro. Creo firmemente en ello". Su compañera de vida y socia comercial, Katja Žic Antunović, le brindó un gran apoyo en la realización de este proyecto.

Celebración de 140 años de turismo en la Isla de la Vitalidad

Establecer el récord mundial fue la manera perfecta de coronar la celebración del gran jubileo: 140 años desde los inicios del turismo organizado en Lošinj. La historia del turismo en esta isla se remonta a 1885, cuando el médico vienés Dr. Conrad Clar llegó a Mali Lošinj con su hijo enfermo Walter. Encantado por el clima benéfico y notando la rápida recuperación de su hijo después de solo tres semanas de estancia, el Dr. Clar reconoció el potencial de la isla como balneario. Su llegada se considera el comienzo de la era turística de Lošinj.

Poco después, gracias también a las investigaciones meteorológicas de Ambroz Haračić y a las iniciativas de la población local e invitados distinguidos como el archiduque austrohúngaro Karl Stephan, se fundan la Sociedad para el Embellecimiento y la Reforestación (1886) y la Sociedad de Turismo (1887). La reforestación intensiva creó densos bosques de pinos, especialmente en la bahía de Čikat, y se abren los primeros hoteles (Vindobona en Mali Lošinj 1887) y pensiones. El momento clave ocurrió en 1892 cuando Mali Lošinj y Veli Lošinj fueron declarados oficialmente balnearios climáticos de la Monarquía Austrohúngara. A lo largo de las décadas, Lošinj se desarrolló, construyó infraestructura, cuidó su patrimonio natural y cultural y se hizo reconocida como la "Isla de la Vitalidad", un destino de salud, sostenibilidad y auténtico aire mediterráneo.

Unión de tradición, innovación y comunidad

El director de la Oficina de Turismo de la Ciudad de Mali Lošinj, Dalibor Cvitković, no ocultó su satisfacción por el éxito del evento: "No hay mejor manera de conmemorar los 140 años de turismo en Lošinj que estableciendo un récord mundial, y precisamente con el Krokant de Lošinj, uno de los símbolos más reconocibles de nuestro rico patrimonio marítimo y cultural. Este proyecto trasciende la mera hazaña gastronómica; envía un fuerte mensaje sobre la comunidad, el orgullo y la identidad de nuestra isla".

Cvitković enfatizó que este récord es una mezcla de tradición e innovación, con la que Lošinj ha alcanzado nuevas alturas, tanto literal como simbólicamente. Agradeció a todos los que contribuyeron de alguna manera a la realización de este proyecto único, destacando especialmente a Slastičarnica Moby Dick, al maestro Petar Goleš y su equipo por su visión y trabajo dedicado, y a Katja Žic Antunović por su apoyo crucial. "¡El Krokant de Lošinj ahora está inscrito oficialmente en el Libro Guinness de los Récords, otro motivo excepcional de orgullo para todos nosotros en la Isla de la Vitalidad!" concluyó Cvitković.

Culminación de la celebración con Parni Valjak

La ceremonia en la plaza principal de Mali Lošinj culminó en las horas de la noche. Después de la medición oficial y la proclamación del récord, siguió la tradicional ceremonia de romper el krokant con un sable, para deleite del público reunido. Se repartieron trozos del dulce récord entre los presentes, para que todos pudieran probar parte del éxito histórico y llevarse consigo un deseo de felicidad y prosperidad.

Este dulce espectáculo, que unió a numerosos lugareños y visitantes en la celebración de la tradición isleña y el gran jubileo, se completó con un gran concierto gratuito. La legendaria banda Parni Valjak, con su nuevo cantante Igor Drvenkar, ofreció una noche para recordar, llenando la plaza de energía, emociones y sus éxitos atemporales, concluyendo así de la manera más hermosa este día histórico para Mali Lošinj y toda la isla de Lošinj.