Las últimas investigaciones revelan que el agua en la Luna tiene un origen dual, combinando material similar a la Tierra primitiva y fuentes cometarias, lo que abre nuevas perspectivas para la futura exploración espacial y la presencia humana en la Luna.
Investigaciones recientes utilizando el Telescopio Espacial James Webb han descubierto compuestos químicos clave en las superficies de objetos transneptunianos, proporcionando la visión más detallada hasta ahora de su estructura, evolución y conexión con la formación del sistema solar.
Las superllamaradas, explosiones solares extremas, pueden causar perturbaciones significativas en la Tierra. Investigaciones recientes muestran que tales eventos en estrellas similares al Sol ocurren con mucha más frecuencia de lo que se creía anteriormente, con graves consecuencias para nuestro planeta y la tecnología.
Científicos del MIT han descubierto los asteroides más pequeños jamás registrados en el cinturón principal de asteroides, que miden 10 metros de tamaño, utilizando una nueva técnica para analizar datos de telescopios espaciales. Este descubrimiento brinda importantes oportunidades para comprender mejor la evolución del sistema solar y protegerse contra posibles impactos.
El turismo espacial se está convirtiendo en una realidad: el primer vuelo comercial a la luna anunciado para 2025. Las empresas privadas lideran misiones que incluyen una estancia en la luna y la oportunidad de explorar sus superficies. Los precios y los requisitos de viaje solo estarán disponibles para los ricos.
SpaceX ha realizado con éxito pruebas del cohete Starship, que serán cruciales para la próxima misión a la Luna. Esta prueba marca un paso importante hacia el regreso de los humanos a la Luna, por primera vez desde 1972, y es parte de un programa Artemis más amplio que prevé una presencia permanente en la superficie lunar.