La constelación de radar de Copernicus pronto recibirá un nuevo refuerzo – el satélite Sentinel-1D ha completado las verificaciones clave en la Guayana Francesa y está entrando en la fase final de preparación para la conexión con el cohete Ariane 6. El plan es que la nave espacial despegue de Kourou el martes, 4 de noviembre de 2025 para fortalecer la obtención de imágenes continuas de la superficie de la Tierra en todas las condiciones climáticas y para compensar las limitaciones que trae el equipo más antiguo en órbita. En el momento en que se conecte con el satélite Sentinel-1C, lanzado a finales de 2024, Copernicus volverá a tener una doble "vigilancia de radar" para una cobertura del planeta más rápida, confiable y densa.
Doble constelación como estándar para decisiones rápidas
En un sistema como Copernicus, dos satélites operativos en la misma misión no son un lujo, sino una necesidad. El intervalo de revisita sobre la misma ubicación determina directamente qué tan rápido se puede detectar un cambio, ya sea el inicio de una inundación, la aparición de un nuevo deslizamiento de tierra, un desplazamiento de un glaciar, la propagación de una mancha de petróleo o la pesca excesiva. La constelación 1C + 1D permitirá acortar el tiempo de espera para la próxima imagen y series de tiempo más densas, lo que significa una advertencia más temprana y servicios mejor informados que toman decisiones en el terreno. Con esto, también se restaura la lógica para la cual Sentinel-1 fue diseñado originalmente: un servicio operativo que no se detiene ni siquiera cuando las nubes son densas y la noche es larga.
Qué aporta Sentinel-1D en relación a sus predecesores
El corazón de la nave espacial es el C-band Synthetic Aperture Radar (C-SAR), un instrumento que envía y recibe pulsos de radar y a partir de ellos calcula una imagen de alta resolución. Las ventajas del radar son bien conocidas: independencia de la luz del día, resistencia a las nubes y a la precipitación y medición precisa de los cambios en la tierra y el mar. En comparación con la primera generación (1A/1B), el nuevo bloque (1C/1D) ha sido modernizado desde cero: gestión más eficiente del consumo de energía, subsistemas informáticos y de comunicación más robustos y un receptor GNSS compatible con múltiples sistemas para una navegación y determinación de órbita precisas, incluyendo el Galileo europeo, además de GPS y otras constelaciones. Este soporte multi-constelación proporciona un "latido" más estable, rápido y preciso al satélite, lo que finalmente se traduce en una huella de geolocalización más consistente en cada imagen.
Otra novedad importante es la introducción de un sistema de recepción para AIS (Automatic Identification System) en las plataformas más nuevas. AIS es un estándar global por el cual los barcos emiten automáticamente su identidad y posición. Cuando la imagen de radar y las señales AIS se observan juntas, se arma una historia más completa sobre el tráfico en el mar: dónde están las embarcaciones que tienen el transpondedor encendido, dónde aparecen "puntos oscuros" sin AIS, cómo el movimiento coincide con las condiciones climáticas, las olas y las corrientes. En la práctica, esto significa mejor seguridad marítima, vigilancia pesquera más efectiva y reacción más rápida en la búsqueda y rescate.
Por qué la continuidad es crucial: qué cambia con el 1D
Sentinel-1A lleva ya 11 años en órbita y funciona por encima de su vida útil diseñada. Gracias a Sentinel-1C, la constelación volvió a trabajar en modo dual con el 1A en 2025, pero la llegada del 1D fortalecerá las operaciones para el próximo ciclo de Copernicus. En la práctica, esto significa: más órbitas al día con adquisiciones útiles, un cambio más flexible entre los modos de obtención de imágenes (por ejemplo, banda ancha para un mapeo rápido de inundaciones o banda más estrecha para deformaciones urbanas) y una reducción de la carga de planificación de tareas entre las dos naves espaciales. El efecto es más visible en el tiempo de retorno más corto a ubicaciones críticas y en la disponibilidad más estable de los productos a través de los sistemas de distribución.
Preparaciones en Kourou: desde la llegada hasta las pruebas funcionales
Una vez que el Sentinel-1D fue entregado a la Guayana Francesa, los equipos en Kourou realizaron el protocolo estándar: verificación del sistema de presión y estanqueidad, luego un "electrical check-out" para todos los subsistemas principales: alimentación, control térmico, comunicaciones, computadora, control de actitud y, por supuesto, la línea de radar. Los ensamblajes de antena AIS, que se transportan por separado por seguridad, fueron integrados en la nave espacial y luego verificados con una prueba final de conectividad para confirmar la conexión eléctrica y la telemetría correctas. Estos pasos, aunque rutinarios, crean una "cinta dorada" de datos que se utiliza como referencia en cada encendido posterior del sistema, durante el reabastecimiento de combustible, la conexión a la etapa superior del cohete y el despliegue vertical final en la rampa.
Ariane 6: logística de lanzamiento y ventana de tiempo
El lanzamiento del Sentinel-1D está programado para el 4 de noviembre de 2025 en un cohete Ariane 6 en configuración 62 (dos propulsores de refuerzo). La nave espacial apunta a una altitud de alrededor de 700 km en una órbita heliosincrónica. Ariane 6 en 2025 entra en la fase de misiones operativas regulares, y precisamente este tipo de entrega "de servicio" de un satélite de radar de Copernicus ilustra su papel clave en la autonomía europea de acceso al espacio. Para el equipo de tierra, esto significa un ritmo bien practicado: ensamblaje final del "stack" (satélite + adaptador + etapa superior), cierre del carenado (fairing), despliegue en la rampa de lanzamiento y una serie de verificaciones finales hasta T-0.
Cómo el radar "ve" el mundo: una guía breve para los lectores
A diferencia de los satélites ópticos que fotografían con la luz del sol, el radar mide sus propios reflejos. El C-SAR emite ondas con una frecuencia de alrededor de 5.4 GHz y a partir de la señal de retorno, reconstruye patrones claros y oscuros que dependen de la rugosidad, la humedad, la geometría y el movimiento de la superficie. Por eso, la tierra inundada, los campos mojados y el mar en calma se "firman" de manera diferente a la tierra seca, los bosques o un mar con oleaje. En la interferometría (InSAR), se comparan las informaciones de fase de dos imágenes y se calcula un movimiento subcentimétrico del suelo, una excelente herramienta para deslizamientos de tierra, minas, terremotos y estabilidad urbana. En aplicaciones marinas, se extraen mapas de viento del ruido del radar y del patrón de olas capilares cortas, y la geometría de las manchas oscuras revela los derrames de petróleo.
Para quién son más valiosos los datos: de los servicios de emergencia a la agricultura
Los servicios de emergencia y la protección civil confían en Sentinel-1 para la segmentación rápida de las llanuras aluviales, la determinación de las carreteras disponibles y la evaluación de los daños inmediatamente después de una tormenta. Las autoridades marítimas utilizan una combinación de SAR y AIS para rastrear los movimientos de las flotas, monitorear las zonas de pesca y detectar patrones sospechosos. Los servicios geológicos monitorean la estabilidad de las laderas, las zonas de riesgo alrededor de fallas activas o vertederos de residuos. Los urbanistas e ingenieros detectan el lento hundimiento de los terraplenes, los asentamientos y las carreteras. La agricultura, a partir de las mediciones de radar de la humedad y la estructura de la vegetación, construye indicadores de estrés de los cultivos, lo que ayuda en el seguro y la planificación del riego. Los científicos del clima monitorean los cambios en la capa de hielo y la dinámica de los glaciares, mientras que las organizaciones ecológicas utilizan el radar para la vigilancia de humedales, bosques y ecosistemas costeros durante todo el año.
Retorno de datos más rápido y mejor entrega a los usuarios
El ecosistema de entrega de datos de Copernicus ha sido renovado a fondo en los últimos años. Sentinel-1C comenzó las operaciones preliminares a fines de marzo de 2025 mientras el período de puesta en servicio se desarrollaba en paralelo, y sus productos se pusieron progresivamente a disposición de los usuarios. Con la llegada del 1D, se espera un tiempo aún más corto desde la adquisición hasta la publicación gracias a los planes de obtención de imágenes optimizados, las capacidades de las estaciones terrestres y un cronograma de enlace descendente adaptable. Para los usuarios finales, esto significa prácticamente una mayor probabilidad de que descarguen a tiempo la imagen que necesitan para el terreno.
Finesse técnica: modos, resoluciones y geometría orbital
Sentinel-1 opera en varios modos estándar. Interferometric Wide Swath (IW) es el "caballo de batalla" sobre tierra: un ancho de franja de hasta 250–300 km, píxeles de ground-range del orden de 5–10 m, ideal para deformaciones y mapas de inundaciones. El modo Extra Wide (EW) se prefiere sobre las costas y el mar abierto, donde es más importante cubrir la mayor área de agua posible. El modo Stripmap (SM) se utiliza para áreas específicas en alta resolución. La configuración orbital con dos satélites en una fase de 180° proporciona una mejor densidad temporal, y cuando se necesita coherencia interferométrica, los planificadores pueden "coser" también sobrevuelos repetidos especiales sobre la misma trayectoria, para un monitoreo detallado de una ciudad, una presa o una mina.
GNSS y órbita precisa: por qué es importante para el usuario
La precisión del geoposicionamiento de la escena es tan importante como la nitidez de la propia imagen de radar. Los nuevos receptores GNSS con soporte para múltiples constelaciones permiten una determinación precisa de la órbita (POD) con errores centimétricos en el post-procesamiento. Una mejor órbita significa menos sesgo en la geocodificación y una comparación más estable de las escenas a lo largo del tiempo, crucial para todas las series en las que se buscan movimientos sutiles del orden de milímetros por semana o por mes.
AIS como un "segundo par de ojos" sobre el mar
La imagen de radar muestra excelentemente todo lo que deja un contraste en el mar: un barco, una superficie con oleaje, una mancha de petróleo, pero el radar no "sabe" el nombre de la embarcación. AIS complementa esta imagen con identidad y rumbo. A nivel de los centros operativos, esto significa que un objetivo detectado en el SAR puede ser emparejado rápidamente con los mensajes AIS, o marcado como "contacto sin AIS" si el transpondedor está en silencio. Tales patrones son particularmente interesantes para el monitoreo de áreas marinas protegidas, el seguimiento de corredores cerca de instalaciones energéticas y el control de la pesca ilegal.
Qué significa "mejor revisit" en cifras
En condiciones ideales, dos satélites en nodos opuestos de la órbita pueden reducir a la mitad el tiempo de retorno sobre la misma ubicación. Esto no es solo una métrica conveniente para presentaciones, sino una diferencia operativa entre "demasiado tarde" y "a tiempo". Si se trata de una inundación que está creciendo a una velocidad de decenas de centímetros por hora, una imagen adicional del segundo satélite puede determinar si un asentamiento necesitará ser evacuado en 12 horas o no. Si se trata de deslizamientos de tierra, conexiones interferométricas más frecuentes dan una señal más temprana de que la pendiente ha entrado en aceleración.
Cadena industrial y fiabilidad
Sentinel-1 es un producto de un gran consorcio europeo que combina experiencias en electrónica de radar, ensamblajes para la gestión de energía, estructuras y software. En el nuevo bloque, las experiencias de la puesta en servicio y las primeras operaciones de Sentinel-1C se han aplicado en los métodos de prueba, los planes de adquisición y la optimización de la cadena terrestre. Esta es una de las razones por las que se espera una estabilización más rápida de Sentinel-1D después de entrar en órbita, con menos riesgos y pausas técnicas más cortas en las primeras semanas de la misión.
Datos y herramientas abiertas: dónde los usuarios trabajan con los productos
Copernicus se mantiene fiel al principio de acceso abierto. Los productos de Sentinel-1 están disponibles a través de múltiples interfaces y servicios para la búsqueda, el procesamiento y la descarga. Los usuarios más avanzados pueden automatizar los protocolos para la descarga y el procesamiento, mientras que los servicios de campo a menudo usarán mapas preconfigurados con capas temáticas. Para aquellos que quieran entender los conceptos básicos, un buen comienzo es pasar por una breve descripción de términos como el instrumento SAR, el GNSS o el AIS, y luego probar flujos de trabajo básicos en visores y herramientas GIS.
Ejemplos de uso en la región: qué significa para Croacia y los países vecinos
En nuestra área, la constelación de radar demuestra ser crucial en varios escenarios. A lo largo del Adriático, se trata de los ciclones de invierno y otoño que traen precipitaciones abundantes, inundaciones repentinas de los torrentes y tormentas. En el karst y las laderas empinadas de los Dinarides, el enfoque son los deslizamientos de tierra y desprendimientos, mientras que en las partes llanas del centro y este de Croacia es importante mapear las vastas zonas de inundación a lo largo de los ríos Sava, Drava y Kupa. La vigilancia marítima también incluye el tráfico de yates estacionalmente aumentado y el tráfico de carga y petroleros a través del Adriático, donde la combinación de SAR y AIS ayuda a las capitanías y autoridades portuarias locales. En la agricultura, los indicadores de radar de la humedad y la estructura del suelo pueden mejorar las evaluaciones de daños después del granizo o una tormenta, lo que es importante tanto para los aseguradores como para los productores.
Qué se prueba realmente antes del combustible
La fase en la que Sentinel-1D está "listo para la finalización antes del reabastecimiento" significa que todas las verificaciones funcionales se han cerrado con éxito. Esto incluye encendidos de "arranque en frío", pruebas de redundancia (cambio a canales de alimentación de reserva, líneas de RF, bancos de memoria), verificaciones de telecomandos y telemetría, y simulaciones de escenarios operativos típicos en órbita. Solo después de eso viene el reabastecimiento de combustible y oxidantes para los empujes de maniobra, el cierre de los paneles de servicio y el "instrument close-out" – el acceso al instrumento se reduce al mínimo y todo se deja a la vigilancia electrónica.
Vida útil operativa y plan B
La vida útil diseñada de Sentinel-1 es de siete años, pero la experiencia operativa muestra que con un buen control térmico y una asignación cuidadosa de los recursos, la posibilidad de operación puede extenderse significativamente. A pesar de eso, la continuidad de la misión nunca se basa en un solo satélite. Por eso el 1D está planeado como un sucesor y socio operativo, y la planificación de las futuras capacidades ya se está considerando dentro del marco del programa a largo plazo Copernicus de segunda generación. El efecto útil para los usuarios: incluso cuando un satélite entra en servicio planificado o se enfrenta a una anomalía, el otro continúa cubriendo las tareas críticas.
De la amplitud bruta al producto de usuario
Los datos SAR brutos pasan por varios niveles de procesamiento, desde productos de Level-0 y Level-1 (por ejemplo, GRD, SLC) hasta productos de Level-2 y mapas temáticos. Cada paso incluye una órbita precisa, correcciones radiométricas, geocodificación y toda una serie de filtros que separan la señal útil del ruido. Sobre el mar, por ejemplo, basándose en el patrón "granulado" del radar, se reconstruye el campo de viento; sobre tierra, a partir de comparaciones de escenas, se calcula el desplazamiento del terreno. La nueva arquitectura 1C/1D con memorias más rápidas y un enlace descendente más confiable ayuda a que un mayor volumen de datos llegue más rápido a los procesadores terrestres y a los usuarios.
Visto a través de los ojos de las comunidades que dependen de la precisión
La hidrología necesita secuencias de varios días para modelar la entrada en las retenciones y evaluar el riesgo para los asentamientos; el transporte quiere saber qué carreteras son transitables después de las tormentas; la energética controla los parques eólicos y las líneas eléctricas en terrenos expuestos; el turismo y el sector marítimo se basan en el conocimiento de la situación sobre la ruta, las olas y el viento. En cada una de estas ramas, un revisit más corto y una mayor fiabilidad de la entrega que trae el 1D reducen la incertidumbre en la planificación. Cuando se le agrega el AIS, la imagen en el mar se vuelve más comprensible y verificable, lo que beneficia a todos, desde las autoridades portuarias hasta las instituciones de investigación.
Calendario hasta el despegue
En las semanas restantes hasta el 4 de noviembre de 2025, sigue la secuencia que los equipos ya han perfeccionado en muchas misiones: finalización de la nave espacial (cierre de paneles, protecciones y cables), reabastecimiento de combustible, integración en la etapa superior del Ariane 6, conexión con el carenado, despliegue en la rampa de lanzamiento, y el "wet dress rehearsal" y el cuenta regresiva final. El Día D, la ventana de tiempo y el estado de las capas altas de la atmósfera determinarán el momento del despegue, y el satélite necesitará una serie de maniobras para llegar a su punto objetivo y encender el instrumento de acuerdo con el plan de la comisión.
Por qué es importante seguir incluso las verificaciones "aburridas"
Estos períodos de preparación rara vez llenan los titulares, pero es precisamente en ellos donde se crean las condiciones para años de operación confiable en órbita. Cada tornillo y cada curva de voltaje obtendrán su firma en los registros; estos valores se utilizan más tarde cuando el software en órbita busca una anomalía o cuando un ingeniero en la Tierra compara el comportamiento antes y después de alguna protección automática. Sentinel-1D ha llegado a este punto donde solo le queda la "cosmética" antes del reabastecimiento y el encuentro con Ariane 6, y las comunidades de usuarios de toda Europa ya cuentan con los datos que llegarán en las primeras semanas después del despegue.
Cómo pueden prepararse los usuarios
Cualquiera que quiera aprovechar todo el potencial de la llegada del 1D puede preparar desde ahora los flujos de trabajo para una ingestión más rápida de los datos, actualizar el enmascaramiento de nubes en los análisis híbridos (SAR + sensores ópticos) y asegurarse de que los sistemas geodésicos y las proyecciones estén configuradas de manera consistente en todas las herramientas. También es bueno verificar las alarmas automatizadas para eventos extremos para que se activen el procesamiento y la diseminación a los equipos en el terreno sin intervención manual. En los centros marítimos, vale la pena definir de antemano las reglas de conexión de las detecciones SAR y el AIS, por ejemplo, umbrales para marcar un "contacto sospechoso" si se ve un objetivo en el radar sin un transpondedor activo.
Hora de creación: 4 horas antes