Los viajeros frecuentes conocen bien la frustración que supone el internet a bordo: lento, poco fiable y a menudo demasiado caro. Pronto, esa experiencia podría cambiar drásticamente, convirtiendo el tiempo pasado en un avión en horas productivas o en puro entretenimiento. Alaska Airlines ha anunciado una asociación estratégica con Starlink de SpaceX, prometiendo revolucionar la conectividad aérea. Esta colaboración marca el comienzo de una nueva era en la que los pasajeros de todos los vuelos de este grupo de aerolíneas, incluida la recientemente fusionada Hawaiian Airlines, tendrán acceso a internet con una velocidad y fiabilidad comparables a las que tienen en su propio hogar.
Este movimiento no es solo una actualización técnica; se trata de una redefinición completa de la experiencia de viaje. El plan es ambicioso: el inicio de la implementación está previsto para 2026, con el objetivo de que para 2027 toda la flota, desde aviones regionales hasta aeronaves de fuselaje ancho para vuelos de larga distancia, esté equipada con la tecnología satelital más moderna. Con este paso, Alaska Air Group se posiciona como líder en el mercado, estableciendo un nuevo estándar de lo que los pasajeros pueden y deben esperar a una altitud de 10.000 metros.
Revolución a 10.000 metros: ¿Qué aporta Starlink a los pasajeros?
La diferencia clave entre Starlink y las soluciones existentes radica en la tecnología. El Wi-Fi tradicional en los aviones se basa en satélites geoestacionarios (GEO) que orbitan a una altitud de casi 36.000 kilómetros sobre la Tierra. La gran distancia que la señal debe recorrer da como resultado una alta latencia, es decir, un retraso, lo que hace que actividades como las videollamadas, los juegos en línea o incluso la carga rápida de páginas web sean casi imposibles. Starlink, por otro lado, utiliza una densa red de más de 8.000 satélites en órbita terrestre baja (LEO), a una altitud de solo 550 kilómetros. Esta distancia drásticamente menor permite una latencia inferior a 99 milisegundos y velocidades de descarga que alcanzan hasta los 500 Mbps. En la práctica, esto significa que el internet de Starlink es al menos siete veces más rápido que los sistemas de la competencia.
Para los pasajeros, estas especificaciones técnicas se traducen en ventajas concretas. Ya no habrá interrupciones durante la transmisión de su serie favorita en alta definición. Los viajeros de negocios podrán participar en videoconferencias sin problemas, editar documentos en tiempo real y mantenerse conectados con la oficina a través de plataformas como Slack o Microsoft Teams. Las familias de vacaciones podrán usar varios dispositivos simultáneamente: mientras los padres navegan por las redes sociales, los niños podrán jugar a juegos en línea o ver dibujos animados. La conectividad estará disponible desde el momento de embarcar en el avión hasta el desembarque en el destino, sin interrupciones durante el despegue y el aterrizaje, lo que se conoce como conectividad "gate-to-gate" (de puerta a puerta).
Ben Minicucci, director ejecutivo y presidente de Alaska Air Group, destacó la importancia de este avance: "Dado que Starlink ya está activo en los vuelos de Hawaiian Airlines, y las instalaciones en la flota de Alaska comenzarán el próximo invierno, estamos orgullosos de ofrecer el internet más rápido y fiable del cielo. Aseguraremos la conectividad de puerta a puerta en casi todos los aviones de ambas compañías". Además, gracias a una asociación exclusiva, este servicio premium será gratuito para los pasajeros más fieles, los miembros del programa de lealtad, lo que aumenta aún más el valor de viajar con Alaska.
Cobertura global sin interrupciones: El fin de las "zonas muertas" sobre océanos y polos
Uno de los mayores desafíos para el internet aéreo actual es mantener una conexión estable durante los largos vuelos intercontinentales, especialmente aquellos que cruzan océanos o zonas polares. Este es un problema con el que se encuentran a menudo los pasajeros en vuelos de América del Norte a Asia y Europa. A medida que el avión se desplaza por rutas del norte, la conexión con los satélites se debilita o se pierde por completo. La constelación de satélites LEO de Starlink resuelve este problema. Gracias al enorme número de satélites que orbitan constantemente el planeta, la señal está siempre disponible, sin importar la ubicación geográfica del avión.
Con esta tecnología, Alaska Airlines se convertirá en la primera aerolínea estadounidense en ofrecer un servicio de internet ininterrumpido y de alta velocidad en vuelos de larga distancia desde su centro de operaciones clave en Seattle (Aeropuerto Internacional de Seattle-Tacoma). Esta es una ventaja estratégica, dado que Seattle es un importante centro tecnológico y un punto clave para los viajes internacionales. "Estamos encantados de proporcionar internet fiable y de alta velocidad en los vuelos de Alaska Airlines", dijo Chad Gibbs, vicepresidente de Operaciones de Starlink en SpaceX. "Desde que suben al avión hasta que llegan a su destino, los pasajeros de Alaska experimentarán ahora la mejor conectividad aérea del mundo".
Más que internet: Un movimiento estratégico para el futuro de la aviación
La introducción de Starlink no es una iniciativa aislada, sino parte de una visión más amplia y de múltiples capas de Alaska Airlines destinada a mejorar la experiencia general del cliente. La compañía invierte continuamente en innovaciones para hacer el viaje más sencillo y agradable. Entre las novedades recientes destacan el programa TSA PreCheck® Touchless ID, que agiliza los controles de seguridad, un sistema único para reservar comida y bebida por adelantado a través de una aplicación móvil, y un proceso de facturación totalmente automatizado que comienza incluso antes de que el pasajero llegue al aeropuerto. La integración de los programas de lealtad de Alaska y Hawaiian Airlines en un único sistema líder en la industria y el lanzamiento de una tarjeta de crédito premium con numerosos beneficios para los viajeros son elementos adicionales de esta estrategia integral. Un internet de primera categoría se convierte en la culminación de estos esfuerzos, transformando el tiempo pasado en el aire de un mal necesario a una parte integral y agradable del viaje.
Sostenibilidad y tecnología: Una ventaja medioambiental inesperada
Además de revolucionar la conectividad, la tecnología Starlink también contribuye a los objetivos de sostenibilidad. Las antenas que se instalan en los aviones son considerablemente más avanzadas que las de la competencia. Utilizan tecnología de antenas de barrido electrónico (electronically steered antennas), lo que significa que no tienen partes móviles, y su perfil es mucho más bajo y aerodinámico. Una menor huella en la parte superior del avión se traduce en una menor resistencia al aire, lo que afecta directamente a la reducción del consumo de combustible. Se estima que esta nueva tecnología, que incluye el equipo más ligero de la industria, le ahorrará a Alaska Airlines más de 800.000 galones (más de 3 millones de litros) de combustible al año. Este ahorro equivale a una reducción de las emisiones de dióxido de carbono de más de 7.600 toneladas métricas, consolidando aún más la posición de Alaska Airlines como una de las aerolíneas premium estadounidenses más eficientes en cuanto al consumo de combustible.
Hora de creación: 3 horas antes